El principal objetivo de las redes sociales mantener una comunicación activa entre sus miembros, lo cual sin duda alguna es algo positivo.
Sin embargo muchas personas viven de manera permanente en ese mundo virtual y no pueden “desconectarse”, creando así un hábito difícil de dejar que a la larga puede traer algunas consecuencias.
¿Qué es una adicción?
Una adicción es un hábito o acción que realizamos ya sea de manera consciente o inconsciente y que se convierte en algo que una persona hace frecuentemente porque ésto le produce una cierta gratificación mental.
Una persona adicta puede sufrir una gran dependencia psicológica hacia esa conducta, llegando a padecer un comportamiento compulsivo y perdiendo así el interés por otras actividades que anteriormente habían sido gratificantes.
Los síntomas
Una persona adicta a las redes sociales o al internet puede presentar ansiedad compulsiva o una necesidad por querer permanecer siempre “conectado”, ya sea por medio de una computadora personal o mediante el uso de dispositivos inalámbricos como tablets o teléfonos celulares.
Esto resulta en un cambio en la forma de ser de la persona, que se vuelve más alejada de la vida social y que prefiere quedarse solo o sola por más tiempo, viviendo de esta manera en un mundo virtual.
Las consecuencias
Existen muchas consecuencias que pueden tener las personas adictas a las redes sociales, pero entre las principales podríamos mencionar las siguientes:
1. Perjudicar las relaciones personales
Este problema puede general el deterioro o la pérdida de relaciones interpersonales, tanto laborales, amistosas como amorosas, debido a que la persona adicta prefiere dedicar más tiempo a las redes sociales que a las personas que le rodean.
Es común también que muchos matrimonios resultan finalmente en divorcios debido a problemas relacionados como la infidelidad por medio de las redes sociales.
2. Provocar estrés y ansiedad
Una de las principales causas de esta adicción es el empleo compulsivo del medio por el hecho de crear una aprobación social porque esto representa algo que aparentemente es positivo para la persona.
Cuando esto no sucede, es decir cuando la persona obtiene pocos me gusta o retweets en sus publicaciones cae en un bajón anímico que si es constante puede llevarle a una depresión.
3. Privación del sueño
La persona adicta a las redes sociales prefiere no dormir con tal de estar conectado y de esa manera enterarse de lo que está pasando con los demás.
4. Distracciones en los centros de trabajo
A causa de permanecer mucho tiempo conectado, la productividad en el trabajo puede bajar considerablemente o también puede suceder que el trabajo no sea bien hecho, debido a las distracciones que se presentan y a la pérdida de tiempo que esto conlleva.
5. Problemas físicos
Esta es una de las consecuencias más graves, que en ocasiones hasta puede requerir la intervención de un especialista, para tratar los problemas derivados por la adicción. Algunos de estos problemas que se presentan de manera frecuente son problemas de la espalda o la vista cansada.
A largo plazo también puede resultar en un aumento de peso o problemas relacionados con el corazón, debido al poco ejercicio físico que la persona debe realizar.
6. Afectar la concentración
Este problema afecta en gran parte a la población estudiantil que por ejemplo, en lugar de estudiar para un examen, prefiere permanecer conectado, lo cual se traduce en un bajo rendimiento académico.
7. Pérdida de tiempo
El abuso o mal uso de las redes sociales resulta finalmente en una pérdida del tiempo que podríamos emplear en realizar otras actividades que nos resulten más gratificantes o productivas, como por ejemplo realizar actividades en el hogar, visitar familiares o conocidos, salir a caminar o correr, buscar trabajo, hacer las tareas, dormir, relajarse, entre otras.